Daniel Garro Sánchez
Siguiendo con mis recomendaciones de libros recientemente publicados, el día de hoy les traigo la noticia de que el escritor costarricense José Ricardo Chaves acaba de presentar Voces de la sirena: Antología de literatura fantástica de Costa Rica (Primera mitad del siglo XX), de la mano de Uruk Editores.
En esta colección, presentada el pasado jueves 19 de julio en el Instituto México, el riguroso investigador expone que la literatura fantástica en Costa Rica no es un fenómeno nuevo, sino más bien ignorado o invisibilizado por el canon.
Chaves (quien, teniendo décadas de vivir en suelo mexicano, demuestra estar mucho mejor informado sobre las letras nacionales que muchos habitantes del suelo patrio) reúne y comenta veinticuatro textos. La mayoría de ellos pertenecen a autores que, si bien han sido reconocidos por el canon en mayor o menor grado, no ha sido por crear literatura fantástica; tales son los casos de Manuel Argüello Mora, Joaquín García Monge y Alfredo Cardona Peña. La antología también abarca escritores que, canon o no, de cualquier forma se resistieron al costumbrismo y el realismo predominantes en la literatura nacional, como las emblemáticas Eunice Odio y Yolanda Oreamuno. Por último, la antología cuenta con la presencia de autores menos conocidos como Rafael Ángel Troyo y Eduardo Calsamiglia. Lectura recomendada para los amantes (y autores) del género, y también para aquellos que todavía se niegan a aceptar el lugar que tiene la literatura fantástica en la narrativa costarricense.
Una excelente noticia que también recibimos del mismo José Ricardo Chaves la noche de la presentación, es que su labor continuará con otra antología similar correspondiente a la segunda parte del siglo XX, y sin descartar que sus investigaciones abarquen incluso el movimiento de publicaciones de ciencia ficción, terror y fantasía de los años más recientes.
Admirable trabajo el de Chaves, cuyo aporte al estudio de las letras costarricenses es digno de admirar y agradecer.
En esta colección, presentada el pasado jueves 19 de julio en el Instituto México, el riguroso investigador expone que la literatura fantástica en Costa Rica no es un fenómeno nuevo, sino más bien ignorado o invisibilizado por el canon.
Chaves (quien, teniendo décadas de vivir en suelo mexicano, demuestra estar mucho mejor informado sobre las letras nacionales que muchos habitantes del suelo patrio) reúne y comenta veinticuatro textos. La mayoría de ellos pertenecen a autores que, si bien han sido reconocidos por el canon en mayor o menor grado, no ha sido por crear literatura fantástica; tales son los casos de Manuel Argüello Mora, Joaquín García Monge y Alfredo Cardona Peña. La antología también abarca escritores que, canon o no, de cualquier forma se resistieron al costumbrismo y el realismo predominantes en la literatura nacional, como las emblemáticas Eunice Odio y Yolanda Oreamuno. Por último, la antología cuenta con la presencia de autores menos conocidos como Rafael Ángel Troyo y Eduardo Calsamiglia. Lectura recomendada para los amantes (y autores) del género, y también para aquellos que todavía se niegan a aceptar el lugar que tiene la literatura fantástica en la narrativa costarricense.
Una excelente noticia que también recibimos del mismo José Ricardo Chaves la noche de la presentación, es que su labor continuará con otra antología similar correspondiente a la segunda parte del siglo XX, y sin descartar que sus investigaciones abarquen incluso el movimiento de publicaciones de ciencia ficción, terror y fantasía de los años más recientes.
Admirable trabajo el de Chaves, cuyo aporte al estudio de las letras costarricenses es digno de admirar y agradecer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario